Mi cuerpo limita al norte con el sueño
al sur con los pies en la tierra
al este con un ala
al oeste con otra.
Cuando miro al norte
las alas se extienden,
anuncian vuelo
y el sur olvida su existencia.
A poco que me elevo
hay llanto por lo perdido
y llanto por lo que pierden.
¿Qué hará que los árboles hablen
ruja el mar o que me llegue tu súplica?
y a poco que me elevo
miro al sur y vuelvo
a tener los pies en la tierra.